A partir del 1 de julio de 2025, las empresas con ingresos menores a seis millones de euros deberán enviar sus facturas a la Agencia Tributaria. Esta nueva obligación no está relacionada con la Ley Crea y Crece, que impone la emisión de facturas electrónicas.
Hacienda implementará una aplicación gratuita para que pymes y autónomos envíen sus facturas de inmediato, permitiendo la expedición de hasta 100 facturas anuales y reduciendo costes. Aunque la factura electrónica es obligatoria desde 2015 para algunos, muchos aún no la utilizan. El reglamento publicado en 2023 exige que, a partir de 2025, todos usen programas de facturación certificados por la Agencia Tributaria, con el objetivo de estandarizar procesos y combatir el fraude fiscal.
El sistema «Verifactu» permitirá la emisión de facturas verificables y su envío en tiempo real a Hacienda, lo que facilitará el control de pagos y reducirá la morosidad. Además, la facturación electrónica aporta seguridad, ahorro de espacio y menores costes al digitalizar las transacciones.